Y aquí llegamos al ejemplo perfecto de como NO se debe hacer una película de superhéroes.
Aunque, para ser honesto, debo decir que los primeros 5 minutos me gustaron. La historia de como obtuvo sus poderes, de como perdió a su padre (otro superhéroe más) y de como se entrenó. Cuando se hace mayor es cuando todo se estropea.
Ben Affleck siempre será recordado por ese papel y lo mal que lo hizo, y se le ha girado en contra ahora que será el próximo Batman. Colin Farrell tuvo un papel difícil, ya que el villano estuvo muy mal escrito, pero él encima sobreactuó para empeorarlo. Michael Clarke Duncan como Kingpin podría ser peor visto el panorama, lo medio salvo, y Jennifer Garner (entonces en su cima como actriz haciendo Alias) como Elektra tampoco convence, y mucho menos para darle una peli en solitario un par de años más tarde.
En fin, muy malas interpretaciones, malos guiones y muy, pero que muy malos efectos especiales. Para mi lo peor de todo. Cada salto que daba te daban ganas de llorar o de tirarle las crispetas a alguien. Si te gusta mucho Marvel te exasperarás, si no te gusta todo el mundillo de los cómics, no te recomiendo que la veas, hazme caso.
Bueno, 12 años después, Disney ha recomprado los derechos del personaje y se ha anunciado una serie. A ver si por fin le hacen justícia a uno de los personajes favoritos de los fans marvelitas que, después de esa peli, lo esperan con ansias...
Nota: 3/10